dreaming, sheets and coffee.

sábado, 16 de julio de 2011
Bien, y, ¿para qué?
Para morir ahora, cuando aún estoy a tiempo, y que no me duela tanto tu ausencia. Para salvar lo que en mí ya no puede salvarse, Para sentir el eterno paso del tiempo, que avanza despacio, porque no tiene prisa.
Al abrir los ojos en mitad de la noche, tengo una curiosa percepción sensorial, una sensación de nitidez extraordinaria y te veo. Sí. Silente en mitad del silencio más misterioso. Te estaba esperando aquí, sencillamente aquí. O allí, que es lo mismo.
Como ves sigo una línea de inconsistencia consistente. Y tú debes seguirme. Sígueme, porque he hayado el camino que me llevará hasta donde estés. Te propongo que nos encontremos en el limbo de la conciencia. Un límite entre mundos; allí te veré y me verás y nos veremos. En este corredor angosto detrás de esa avenida oscura. Un lugar desconocido, olvidado, ignorado por todos. Menos por ti, menos por mí.

0 Espejos rotos: